Una carta de la Casa Real británica enviada a la asociación PETA reveló que el rey Carlos III prohibió el foie gras en las residencias reales del Reino Unido.
Carlos III, que milita a favor de la protección de la naturaleza, una agricultura biológica y la lucha contra el cambio climático, ya se oponía desde hacía mucho tiempo al foie gras, alimento hecho a partir del hígado hipertrofiado del pato o del ganso.
“Puedo confirmar que la Casa Real no compra foie gras ni lo sirve en sus residencias reales, ni tampoco está previsto que esta política cambie”, añadió Johnstone-Burt, jefe de la Casa Real, en la carta, con fecha del 10 de noviembre.
En la actualidad, la elaboración del producto está prohibida en el Reino Unido por el maltrato que sufren los patos, pero no así su venta o su importación. Los británicos suelen comer foie gras en fechas señaladas, como las Navidades.