Tras lo informado por el INTA, se estima que al menos hasta primavera, el problema continuará pero no se sabe a qué nivel. Las recientes lluvias no alcanzaron para acabar con todos los focos de incendio.
El sábado a la noche el Comando de Operaciones de Emergencias (COE) informó que se logró reducir en un 85 por ciento los incendios y quedan seis activos. El 40 por ciento del Parque Nacional Iberá fue arrasado.
Un bombero murió en un accidente de auto y muchos otros estuvieron en serio riesgo, al ser encerrados en abanico por las llamaradas. Muchos productores pequeños y medianos lo perdieron todo.