La inflación de mayo perforaría el piso del 8% que se había instalado en abril y, de ratificarse, les quitará presión a las remarcaciones de junio. El dato, que será publicado este miércoles 14 por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), respaldaría la estrategia del ministro Sergio Massa de intervenir en el mercado cambiario para frenar la última corrida financiera y evitar una devaluación brusca que disparara una aceleración descontrolada de los precios. La confirmación le abrirá dos puertas al jefe del Palacio de Hacienda: el cierre del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional; y su lanzamiento electoral como candidato presidencial.
El promedio de las consultoras pronosticó una suba del IPC por encima del 9%, incluyendo al Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) que publicó el viernes pasado el Banco Central. Hubo un antecedente: la inflación de CABA fue del 7,5%. “Tenemos una diferencia de más del 1% en relación con la medición de abril, cuando al INDEC le dio más arriba que a las consultoras, debido a que ingresó en ese registro el efecto de la corrida cambiaria, que no había tenido incidencia en las mediciones privadas”, aclaró una fuente oficial, que integra el equipo económico.
De hecho, otra fuente ministerial, muy cercana a Massa, adelantó que las remarcaciones de la primera semana de junio estaban congeladas, debido a que “los mayoristas se portaron bien”, al respetar el acuerdo de precios que negoció la Secretaría de Comercio, que conduce Matías Tombolini. “El aumento en las góndolas de supermercados fue de 0%”, según el relevamiento que hace esa dependencia oficial, a través de un sistema de mediciones on line de los precios en los centros comerciales. El foco está puesto en los productos de primera necesidad, en donde intervienen la industria, los mayoristas y los grandes comerciantes.
