Este viernes, en pleno centro salteño, se derrumbó la mampostería de una casa, ubicada en Vicente López y Leguizamón. A raíz de lo sucedido, los semáforos quedaron apagados y no hay electricidad en los domicilios aledaños.
Afortunadamente, no había gente transitando, ya que sucedió cerca de las 2 de la madrugada, por lo que no hubo que lamentar heridos tras la caída de los escombros.
Además, el tránsito se vio restringido y controlado por efectivos ante la ausencia de semáforos. Sin embargo, informaron que alrededor de las 12 del mediodía ya estarían restablecidos todos los servicios y funcionando normalmente.