Patio San Francisco se llama el restaurante y confitería, que tuvo su inauguración oficial el viernes último y esta semana se pondrá a punto para recibir a salteños y turistas a partir de la semana próxima. Luego de su apertura, el lunes 15, el espacio funcionará de martes a domingo de 9 a 00, con capacidad para 100 personas.
En las galerías y en el mismo patio, cuyo nombre original era Santa Clara, se ubican las mesas y las sillas que pronto estarán llenas de visitas, en torno a la fuente central. El campanil de la basílica, de 54 metros, el más alto de Sudamérica, le sirve de custodia y se convierte en el mejor escenario para un momento inolvidable.
La confitería se conecta por dentro con el museo y con la biblioteca, con la idea de ampliar la oferta de turismo religioso en el convento y aumentar la propuesta gastronómica en el Paseo de la Fe, que va desde la iglesia de La Merced hasta el convento San Bernardo, en pleno centro de la ciudad.
"La oferta es mucho más que gastronómica; es una oferta cultural", aseguró Facundo Albornoz, coordinador del complejo cultural y director del museo. Desde la confitería hay acceso gratuito a la biblioteca, que tiene libros de 1900 en adelante, y desde allí se puede acceder también al museo, que ofrece visitas guiadas cada una hora, desde las 11 hasta las 18.
