El presbítero y vicario judicial de la Arquidiócesis de Salta, Loyola Pinto y de San Cristóval, dijo que la Iglesia Católica todavía no reconoció a la Virgen del Cerro dentro de sus creencias religiosas ya que “la vidente”, María Livia, puso obstáculos en el proceso de reconocimiento. Una de las trabas es que nunca presentó el resultado del examen psicofísico que le hicieron hace diez o quince años atrás.
El Vicario Judicial, explicó que la fe del pueblo a la Virgen María, forma parte de la identidad católica porque es la madre de Jesús pero no se puede confundir esa devoción con una imposición de una supuesta visión de una “vidente que asume ver a la Virgen en cuerpo y alma cada vez que sube al cerro, ya que para eso hay un gran paso”.
En definitiva, para Loyola Pinto y de San Cristóval, la Iglesia no se pudo manifestar sobre la veracidad de la vidente porque puso obstáculos en el proceso para discernir, entonces está todo detenido. “No consta la sobrenaturalidad de las supuestas visiones de María Livia”, aseveró.
El sacerdote agregó que para poder determinar la veracidad o no de supuestas visiones, la Iglesia tiene que examinar tres cosas, primero la coherencia de los mensajes con el Evangelio de Jesús. Luego, se tiene que analizar a la supuesta vidente, en su salud física y mental. En este punto, María Livia no presentó al Obispo, el resultado de su examen de psicodiagnóstico. El tercer y último paso exigido por la Iglesia, es que se estudie el lugar donde aparecería la Virgen.
Finalmente, el Presbítero añadió que el Obispo le solicitó a María Livia que no impusiera las manos porque es un sacramento del orden sacerdotal y por eso ahora impone sobre los hombros. También, le pidió que el centro de atención no fuera ella, sino la Virgen. “No es que no se quiera aceptar a esta Virgen porque la Virgen es una sola, lo que no se acepta es la vocación inventada o supuestamente visionada por María Livia”, afirmó.
