Pasaron dos meses desde aquel 20 de febrero cuando Gastón Sanz fue visto por última, en la zona del río Castellanos.
El misterio por la desaparición del joven -de ahora 32 años- envuelve una vez más a Salta. En 60 días, la familia jamás tuvo una pista sobre Gastón y aguarda que se oficialice el pago de una recompensa para quien aporte datos o pistas certeras y que la causa no muera.
Andrés, papá del joven, aseguró en PARADA SALTA que la desesperación es tal, que ya no sabe qué hacer.
"No sé dónde ir ni cómo seguir", dijo, argumentando que en este tiempo "no tuvimos absolutamente nada, ninguna pista sobre él".
Sanz mantuvo en las últimas horas una nueva reunión con el ministro de Seguridad y Justicia, Abel Cornejo, ante quien reiteró el pedido de una recompensa para quien aporte datos. Nuevamente, la respuesta fue el compromiso de tramitarla ante Nación, misma respuesta que recibió un mes antes.
"(La recompensa) es la única forma que tengo para que la sociedad pueda aportar un dato. No sé cómo seguir", relató, angustiado.
El paso del tiempo y la falta de datos han llevado a Andrés a no descartar ninguna hipótesis, incluso la más dura para una persona que busca un familiar.
"Hoy no puedo descartar ninguna hipótesis, incluso me preparo para que me digan que él ya no está entre nosotros", contó.
Y concluyó: "no tenemos noción si está bien, si está mal, si se fue a algún lugar o si lo tiene alguien".
*Si lo viste o sabés dónde está Gastón Sanz aporta tu dato al Sistema de Emergencias 911 o en la dependencia policial más cercana.