A 10 días de la intentona golpista del 8 de enero, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, apartó a 40 militares encargados de la seguridad en la residencia presidencial en Brasilia.
La medida fue publicada este martes en el diario oficial de la unión y afecta a funcionarios adscritos a la coordinación del Palacio de la Alvorada, domicilio oficial de los jefes de Estado.
La decisión da continuidad a un anuncio del mandatario, que la semana pasada expresó desconfianza sobre algunos militares que cumplen funciones auxiliares en las sedes de gobierno y prometió una “revisión profunda” en el esquema de seguridad.
Qué pasará con los militares cesanteados por Lula
Los militares despedidos seguirán en las Fuerzas Armadas, pero dejarán de recibir la gratificación a la que tenían derecho por trabajar en el Palacio de la Alvorada, reportó Folha de San Pablo.
TN.