Las historias de la factoría Pixar siempre tienen un entramado construido en base al amor entre cada personaje que aparece que las hace más sensibles que el resto. En Elementos, la nueva película animada de los creadores de Intensa-Mente, este rasgo va por más.
El film dirigido por Peter Sohn, es una verdadera comedia romántica, como aquellas de los ‘90, entre dos personajes que incompatibles que se encuentran y construyen su camino a la par. Todo sucede en medio de una majestuosa animación que apuesta a la creatividad, muchas veces dejada de lado por franquicias reiterativas.
La película Elementos está ambientada en el ficticio mundo de Ciudad Elementos, un lugar en el que viven los habitantes de diferentes mundos: fuego, tierra, agua y aire. En ese lugar, interactúan casi de manera imposible las pequeñas llamas con los seres de agua.
La historia principal es la de Ember, una chica de fuego tozuda, independiente y aguerrida, que ayuda a sus padres a llevar adelante el negocio que forjaron con mucho esfuerzo a lo largo de sus vidas, a pesar de todas las dificultades que pasaron.
Cuando Ember se cruce en su camino con Wade, un ser de agua que inspecciona negocios enCiudad Elementos, todo va a cambiar de manera radical. Ambos deberán arreglar todo lo que no funciona en el local para evitar una clausura y así impedirle un disgusto mayor al padre.
En el centro de todo este dilema que ira desenmarañándose, aparece la relación sentimental que empieza a vislumbrarse entre ellos y que choca contra la realidad: ¿cómo harán para ser compatibles dos seres diametralmente opuestos?
